Venezuela en 2025: Salarios estancados, pobreza persistente y represión en aumento​

En Venezuela, el salario mínimo es de 1,50 dólares mensuales. Mientras tanto, la canasta básica supera los 500 dólares. Hablar de “bonos” no es justicia social: es maquillaje de miseria.

En otro Día Internacional del Trabajador, la situación laboral y social en Venezuela presenta un panorama desolador. A pesar de anuncios gubernamentales sobre incrementos en bonificaciones, el salario mínimo permanece congelado desde marzo de 2022 en 130 bolívares, equivalentes a aproximadamente 1,50 dólares según la tasa oficial del Banco Central de Venezuela.​

Salarios insuficientes frente al costo de vida

El presidente Nicolás Maduro anunció recientemente un aumento en el «Bono de Guerra Económica» de 90 a 120 dólares para trabajadores activos y de 45 a 50 dólares para pensionados. Sin embargo, estas bonificaciones no tienen incidencia en beneficios laborales como vacaciones o aguinaldos, y no compensan la pérdida del poder adquisitivo frente a una canasta básica que supera los 500 dólares mensuales.​

Salarios insuficientes frente al costo de vida

El presidente Nicolás Maduro anunció recientemente un aumento en el «Bono de Guerra Económica» de 90 a 120 dólares para trabajadores activos y de 45 a 50 dólares para pensionados. Sin embargo, estas bonificaciones no tienen incidencia en beneficios laborales como vacaciones o aguinaldos, y no compensan la pérdida del poder adquisitivo frente a una canasta básica que supera los 500 dólares mensuales.

Pobreza y desigualdad en aumento

La Encuesta Nacional de Condiciones de Vida (ENCOVI) 2024 reveló que 3,4 millones de hogares venezolanos vivían en pobreza extrema, una reducción respecto al año anterior, pero aún alarmante. Además, el 56,5% de la población se encuentra en situación de pobreza multidimensional, que incluye carencias en ingresos, educación, salud y otros servicios básicos.

La desigualdad también ha aumentado significativamente. El coeficiente de Gini, que mide la desigualdad de ingresos, pasó de 40,7 en 2014 a 53,9 en 2024. Entre 2023 y 2024, el 10% más pobre de la población tuvo ingresos promedio de 12,50 dólares al mes, mientras que el 10% más rico alcanzó los 633,72 dólares mensuales.

Derechos humanos y represión

El informe anual de la ONG Provea documentó un aumento en la persecución política hacia trabajadores, con casos de hostigamiento, despidos y arrestos, especialmente en el contexto de las elecciones del 28 de julio de 2024. Además, se registraron 2.224 víctimas de tratos o penas crueles, inhumanos y degradantes, un incremento del 88% respecto al año anterior.

Organizaciones internacionales como Human Rights Watch han denunciado una represión brutal en Venezuela, con reportes creíbles de asesinatos y detenciones arbitrarias en el contexto de protestas poselectorales.

Vulnerabilidad a la esclavitud moderna

Según el Global Slavery Index 2023 de la ONG Walk Free, Venezuela es uno de los países más vulnerables a la esclavitud moderna en América Latina, con aproximadamente 9,5 personas por cada mil en situación de esclavitud moderna, incluyendo trabajo forzado y trata de personas.

La situación en Venezuela refleja una crisis multifacética que afecta profundamente a la población. La combinación de salarios insuficientes, creciente pobreza y desigualdad, junto con una represión estatal intensificada, plantea desafíos significativos para los derechos humanos y el bienestar de los ciudadanos venezolanos.​

La opinión emitida en este espacio refleja únicamente la de su autor y no compromete la línea editorial de La Gran Aldea.