Red de censura digital deliberada en Venezuela se agigantó luego del 10 de enero

Después del 10 de enero de 2025 el país experimentó una nueva ola de censura digital sin precedentes. Los bloqueos deliberados y selectivos de sitios web volvieron a arreciar. Entre 2016 y enero de 2025, se registraron 1.335 eventos de cercos informativos ejecutados por los principales prestadores del servicio de internet. Aún siguen activos 949 de estos episodios, que impiden el acceso a 134 sitios web, 60 de ellos correspondientes a medios de comunicación.

La información se desprende de la investigación realizada por la ONG Conexión Segura y Libre, dedicada al monitoreo y documentación de la censura en Venezuela en el ámbito digital y publicada esta semana. A través del programa VE sin filtro, se lleva un récord técnico que es realizado con mediciones y análisis de tráfico. Ya en 2024 la ONG había documentado 561 bloqueos, incluyendo al menos 85 páginas web y 120 URL.

Según el documento es muy preocupante el bloqueo de plataformas como X/Twitter, TikTok, Wikipedia; la app de mensajería cifrada Signal, el bloqueo de servidores DNS (direcciones IP) públicos y los ataques contra los sitios web de VPN, herramientas a las que han tenido que acudir los venezolanos para evadir la censura en internet. En este último caso, están bloqueados 30 sitios web y 32 dominios en línea.

“Solo en enero de 2025, 32 DNS públicos fueron bloqueados, principalmente por la estatal CANTV de forma intermitente. Esto impide que los usuarios que manejaban estos servidores para evadir los bloqueos DNS, no pudieran navegar en internet y quedaran prácticamente sin conexión, aumentando la censura. Fueron 98 eventos de bloqueos a 32 IPs, que corresponden a 15 empresas de servidores.”, revela la investigación.

Llama la atención que el informe al que tuvo acceso LGA, destaca que los obstáculos y la censura en internet, no han sido impuestos solamente por el régimen, sino también por parte de corporaciones e incluso actores privados, lo que agiganta la limitación informativa, silencia aún más a la disidencia y disminuye dramáticamente la posibilidad de acceder a noticias críticas y verdades que están a la vista, pero que cuesta sacarlas a la luz pública.

Tejiendo el cierre de ventanas de información

El informe revelado esta semana a propósito del Día Mundial Contra la Censura en Internet, el pasado 12 de marzo, deja claro que “estos bloqueos son severas restricciones al ejercicio de los derechos humanos, en especial al de la libertad de expresión y al de acceso a la información. Los bloqueos, así como la persecución contra ciudadanos que expresan sus ideas en las plataformas digitales, son también un ejemplo crítico de la reducción y la censura del espacio cívico digital.”

Las cifras presentadas en el documento, gracias al monitoreo, evidencian que la restricción a la información y  la imposibilidad de acceder a nuevas tecnologías que permitan a los ciudadanos avanzar, evolucionar y conectarse con el mundo son una política de Estado, dejando a la población en un aislamiento digital.

A esto se suman el pésimo funcionamiento de los servicios públicos, las fallas del servicio eléctrico, más dramáticas en el interior del país que en la capital, la baja penetración de internet y los elevados costos de servicios de navegación con velocidades aceptables, lo que hace que mucho menos usuarios tengan la posibilidad del acceso digital. Cada vez se cierran más ventanas de información, entretenimiento, búsqueda y comunicación.

Finalmente la investigación destaca de manera más detallada, y considerando que hay sitios web con más de una dirección URL, que se han identificado 228 dominios bloqueados, de los que 180 están activos y 89 pertenecen a medios de comunicación digitales. Los dominios alternativos que forman parte del mismo sitio web son una estrategia para diversificar sus accesos e intentar burlar la censura, porque si nos cierran la puerta nos metemos por la ventana.

Casos de bloqueos activos hasta enero 2025