Edmundo González Urrutia: «No participaremos en farsas diseñadas para perpetuar la dictadura»

"María Corina Machado y yo seguimos de pie, enfrentando juntos esta lucha con la certeza de que Venezuela no se rinde".

En un mensaje contundente, el presidente electo de Venezuela, Edmundo González Urrutia, reafirmó su compromiso con los millones de venezolanos que votaron por el cambio el pasado 28 de julio. Desde el exilio, González Urrutia denunció la feroz persecución del régimen, la desaparición forzada de su yerno y el recrudecimiento de la represión contra su familia y miles de ciudadanos.

Lejos de rendirse, aseguró que ha intensificado sus esfuerzos para consolidar el reconocimiento internacional de su victoria y ejercer presión sobre la dictadura. En su gira por América y Europa, ha sostenido encuentros clave con líderes mundiales, denunciando el fraude del régimen y exigiendo una transición democrática real.

González Urrutia advirtió que no participará en farsas electorales diseñadas para perpetuar la dictadura y llamó a la Fuerza Armada a hacer cumplir el mandato popular expresado el 28 de julio. Además, abordó la difícil situación de la diáspora venezolana, reiterando su compromiso con la lucha por sus derechos en el exterior.

En vísperas de su participación en la Conferencia de Seguridad de Múnich 2025, el presidente electo dejó un mensaje claro: la lucha por una Venezuela libre es irreversible y no descansará hasta hacer respetar la voluntad del pueblo.

Transcripción del mensaje:

Llevamos más de un mes de gira y quiero aprovechar para decirles que reitero mi compromiso con los casi 8 millones de venezolanos que votaron por el cambio el 28 de julio de 2024 y con los millones que me han acompañado en cada país que he visitado. Sigo trabajando desde el exilio para defender esa voluntad de cambio. Mi salida de Venezuela no fue una elección sino una necesidad ante la persecución del régimen que intentó silenciarme pero hoy se demuestra que no lo logró.

Lejos de rendirme he multiplicado mis esfuerzos para lograr el reconocimiento internacional de nuestra historia y fortalecer la lucha por la democracia. He recorrido América y Europa denunciando el fraude del régimen y buscando respaldo para nuestra causa. Me he reunido con líderes de todo el mundo, incluidos presidentes, primeros ministros y parlamentarios, explicando la gravedad de la crisis venezolana y la urgencia de una transición democrática.

Esta no ha sido una simple gira sino una campaña de presión internacional para que se respete la decisión soberana del pueblo. La combinación de las acciones internas, lideradas por María Corina Machado y esta campaña internacional que estoy adelantando, son la punta de lanza de una estrategia que dará sus resultados esenciales como la de hacer efectiva nuestra victoria. Por eso debo preservar la credencial de presidente electo, cualidad que no se extinguirá más que en el momento de asumir el poder definitivamente en el marco de la institucionalidad de Venezuela.

Mientras tanto, la dictadura intensifica la represión. Mi familia ha sido víctima directa de su brutalidad con la desaparición forzada de mi yerno, a quien ni mi hija ni mis nietos de siete y ocho años han podido ver en estos 30 días de angustia y dolor. Somos una familia como la de miles de venezolanos que son perseguidos, encarcelados o forzados al exilio solo por querer un país libre.

María Corina Machado y yo seguimos de pie, enfrentando juntos esta lucha con la certeza de que Venezuela no se rinde. El régimen pretende desviar la tensión con falsas elecciones, pero la comunidad democrática sabe que solo habrá comicios legítimos cuando se respete el resultado del 28 de junio. No participaremos en farsas diseñadas para perpetuar la dictadura.

Nuestra prioridad es hacer valer el mandato que nos dio el pueblo, y ratifico cada una de las palabras dirigidas el pasado 10 de enero a los integrantes de la Fuerza Armada, de la cual soy su legítimo comandante en jefe. La constitución es muy clara y precisa. Los militares deben hacer respetar la soberanía expresada el 28 de junio.

No hacerlo es participar en la ruptura del orden constitucional. Oficiales de la Fuerza Armada y funcionarios de las policías cumplan con su deber. Esa es su obligación.

A los millones de venezolanos que integran la diáspora les aseguro que jamás estarán abandonados. Cuentan con nosotros, porque en todos los encuentros de este recorrido he sido firme en la solicitud de comprensión de la situación de mis compatriotas y la debida tramitación y solución adecuada de sus necesidades. En este sentido, conozco la desazón generada por la suspensión del TPS, estatuto de protección temporal de los venezolanos en los Estados Unidos.

Con el equipo nuestro en ese país, estamos trabajando en las gestiones ante el gobierno del presidente Donald Trump para resolver esta situación de la manera más adecuada, tanto para ese país como para los venezolanos de bien, que son la inmensa mayoría de todos los lugares del mundo donde se encuentran. En todos nuestros encuentros en esta gira hemos podido conversar sobre las investigaciones y hallazgos de capitales provenientes de la economía oscura, como la corrupción, la comercialización de narcóticos y la explotación irregular de minerales, más las desviaciones de dinero que amasan después de vender el poco crudo que produce el país. Precisamente seguimos en nuestra ruta por Europa, comenzando la próxima semana en la Conferencia de Seguridad de Munich 2025, un foro global sobre políticas de seguridad y defensa, que reúne a líderes políticos, militares, empresarios y expertos de todo el mundo para debatir sobre los principales desafíos de seguridad internacional.

Ahí tendré encuentros muy importantes donde abordaremos Venezuela y su impacto en el mundo. Termino este mensaje agradeciendo a todos los venezolanos que me he encontrado en esta gira. Les repito, no están solos.

Seguimos trabajando para que sus derechos sean reconocidos en los países de acogida y para que pronto puedan vivir en una Venezuela libre. Nuestra lucha es firme, nuestra causa es justa y nuestra victoria es irreversible. Les bendigo y les digo que no descansaré hasta hacer cumplir la decisión de cambio del pueblo venezolano.

La opinión emitida en este espacio refleja únicamente la de su autor y no compromete la línea editorial de La Gran Aldea.