María Noelia Romero: “Se emplea más trabajo no calificado porque se complementa con este flujo migratorio que es relativamente más calificado”.

“Los migrantes venezolanos son relativamente más calificados que los trabajadores del Perú”

“En esos barrios de alta migración venezolana cae el salario promedio de los peruanos en dos puntos porcentuales, que significa cobrar 4 dólares menos por semana. Eso no es mucho para un peruano con un salario semanal promedio de 230 dólares”; palabras de María Noelia Romero, del Departamento de Economía de la Universidad de Illinois, en conversación con el economista venezolano, Ángel Alvarado.

En esta oportunidad, en Ceteris Paribus participó como invitada María Noelia Romero, candidata a PhD por la Universidad de Illinois. Conversó junto al economista Ángel Alvarado sobre su papel relacionado con la migración y su impacto en el mercado laboral peruano, especialmente la migración de venezolanos.

Venezuela se ha convertido en una crisis migratoria que nunca había vivido el hemisferio occidental ni América Latina. Digamos que siempre Latinoamérica recibía migrantes de otros países y con el caso venezolano hemos visto a algunas naciones que no tenían tradición migratoria y han tenido que recibir a millones de migrantes, especialmente venezolanos. Mientras, otros tienen leyes muy cerradas a la migración que dificultan conseguir permisos de trabajo. En Panamá, por ejemplo, es difícil ser profesor universitario si no eres panameño. Respecto al movimiento venezolano hacia Perú, es un caso importante para estudiar. Contigo trataremos de entender las características de esa migración venezolana en el mercado laboral peruano.

“No hay un efecto negativo en el empleo de los peruanos en los barrios con mayor inmigración venezolana. De hecho, encuentro un efecto positivo (…) el empleo peruano crece dos puntos porcentuales con respecto a los de poca inmigración”

María Noelia Romero

-¿Cómo es el mercado laboral peruano, qué características tiene y en qué se diferencia con los otros países de la región?

-El mercado laboral peruano en Lima y Callao, tiene dos características relevantes cuando pensamos en el efecto de la migración en el país local. Primero: Gran parte de la fuerza laboral trabaja en condiciones de informalidad laboral. Esto significa que la mayoría de los trabajadores no tienen contratos formales con sus empleadores y, por lo tanto, no gozan de los beneficios del empleo como la seguridad social, cobertura médica, vacaciones, contribuciones a las pensiones, licencias por maternidad, etc. Segundo: Al menos 2/3 de los peruanos en edad de trabajar (entre 15 y 65 años) tienen un nivel educativo bajo, llega a secundaria completa o menos. En economía laboral, los años de educación son relevantes porque están asociados positivamente con mayor productividad o habilidades de los trabajadores. Se suele decir que personas con mayor calificación que el diploma de secundaria son trabajadores calificados altos, mientras que con secundaria completa o menos, son poco calificados. En la región de América Latina, Perú es el tercer país con mayor cantidad de trabajadores en la informalidad con 72%. En primer lugar esta Bolivia con 83% de trabajadores informales, y El Salvador con 79% de la fuerza laboral informal. Con respecto a la educación, Perú está en séptimo lugar en América Latina en un ranking de calidad educativa. Con el 66% de la fuerza laboral que alcanzó secundaria completa o menos.

-Es Altísimo. Una de las grandes discusiones de los noventa era la informalidad en Latinoamérica. Tal vez había una cantidad de alternativas, el modelo chileno con su sistema de pensiones, que está muy cuestionado hoy en día, era como una de las grandes panaceas para resolver el tema de la informalidad. ¿Qué significa ser informal?, ¿qué consecuencias tiene para la pobreza y el ingreso de la gente?

-Esta es una preocupación genuina en toda América Latina. Hay otras dos definiciones más que se usan para distinguir a los trabajadores informales. La primera es el porcentaje de ellos que son autónomos o autoempleados. Esto es un nuevo debate en la investigación de mercados laborales, porque una nueva tendencia es que los trabajadores estén en relación de dependencia pero no aparecen en las planillas de empleados de las empresas. Esta modalidad de contratación siempre fue de aproximadamente un 20% en la región, porque las cargas laborales para los empleadores suelen estar fuertemente reguladas. Por ejemplo, en Perú, cada trabajador representa 48% del costo para las empresas. Es decir, por cada 100 dólares que le pagan a un empleado, el empleador debe cancelar 148 en total por la seguridad social, seguro médico, entre otras obligaciones. Por lo tanto, lo que está pasando es que los empleadores les piden a los trabajadores que ellos se registren como autoempleados, haciéndose cargo de sus propias contribuciones y seguro médico, pero trabajan para una empresa. No son emprendedores. La segunda definición es usar el tamaño de la empresa como aproximación del empleo informal. En economía laboral se suele decir que las empresas con cinco o menos trabajadores tienen a los empleados en negro, sin estos aportes. En mi trabajo uso una definición amplia de informalidad laboral. Identifico a trabajadores informales como aquellos que reportan que no tienen cobertura médica, o trabajan como autónomos, o en una empresa de cinco o menos empleados. Hay mucho “overlap” (superposición) en las definiciones, por ejemplo suele pasar que la mayoría de los que son autónomos trabajan en empresas de cinco o menos empleados. Así que mi definición tiene la flexibilidad y ventaja de tener en cuenta todos los casos posibles que discutimos en economía laboral. Con respecto a la informalidad y pobreza, hay un debate sobre si estas condiciones precarias de los trabajadores es una limitante para que los países se desarrollen o no, y por lo tanto salgan de la pobreza. Por un lado, algunos argumentan que las empresas tienen más flexibilidad al contratar trabajadores sin el costo laboral bajo el régimen laboral. Pudiendo contratar más o menos trabajadores u horas laborales dependiendo de la demanda de sus productos. Esta postura “pro mercado” sugiere que la libertad para las empresas y trabajadores de negociar las horas, salarios sin regulación laboral ayuda a las empresas a ganar más, y por ende pagar mejores salarios a los trabajadores; al mismo tiempo que los trabajadores reciben el salario neto en su bolsillo. Por otro lado, en economía laboral y desde el punto de vista de los gobernantes, uno se preocupa porque los trabajadores tengan un ingreso cuando dejen de trabajar, seguro médico si se accidentan o enferman, u otros beneficios laborales. De esta preocupación, surge la postura de regular los mercados laborales con políticas desde tener un salario mínimo hasta ampliación de los beneficios de empleo como las licencias de maternidad. Por ejemplo, si un trabajador deja de trabajar unos días por enfermedad, es deseable la certeza de que no pierde su empleo o ingreso esos días. El problema de los acuerdos informales, es que suelen ser la gente más vulnerable, de menores ingresos en sus hogares, con menor educación, y también mayores problemas de salud. Por lo tanto, un trabajador en esta condición que no trabaja dos días, tal vez pierde como 30% o más de su salario mensual y puede caer en la pobreza. Hay algunos trabajos que encontraron que al bajar los impuestos de las empresas, estas registran mayor empleo formal. Es decir, con menos impuestos a las empresas estas tienen incentivos para poner a los trabajadores bajo el régimen con los beneficios de empleo, como contribuciones para retiro o seguro de salud. En mi trabajo me enfoco en la migración venezolana, el efecto en el empleo y el salario de los trabajadores peruanos por sector, pero no estudio qué ocurre en la pobreza. Revisé en el caso de los trabajos previos de la migración venezolana y no encontré estudios recientes sobre el impacto en la pobreza. En la literatura de inmigración hay mucho debate sobre si afecta o no el salario, una rama argumenta que no, así que desde ese lado sospecho que no debería tampoco impactar la pobreza. Depende de las condiciones del flujo migratorio y las características del país de destino.

“Los flujos migratorios de Venezuela y otros países eran muy estables en Perú antes del éxodo venezolano”

María Noelia Romero

-Ahora, si las condiciones laborales en Perú no son las más favorables, ¿por qué los venezolanos optaron por migrar a ese país?

-Los venezolanos se fueron por: la crisis económica y la inestabilidad política de Venezuela. Colombia fue el primer destino, mientras que Perú fue el segundo. Hay mayor distancia que Ecuador, menos distancia que Argentina y Chile. La Política Migratoria de Perú es PTP. Contraste con el resto de la región como Colombia. La situación económica de Perú era atractiva a pesar de la informalidad laboral, pues presentó un leve crecimiento económico en los años previos a la pandemia.

-¿Cuándo llegaron los venezolanos a Perú y en cuánto se incrementó la población en ese país?, ¿se distribuyeron por toda la geografía?

-A través de una encuesta (INEI) sobre venezolanos que viven en Perú, a Lima y Callao la mayor cantidad llegó en 2018. En 2017, en el segundo trimestre hubo una tendencia creciente de la llegada de los venezolanos.

    • Existen 1,4 millones de venezolanos al día de hoy en Perú.
    • La población venezolana en Perú representó el 4,6% de la población en 2017.
    • Con base a una encuesta cuya operación se relaciona a su trabajo, hasta diciembre de 2018 más de 500 mil venezolanos arribaron a Perú.
    • Más del 80% de venezolanos residen en Lima y Callao, eso representa un 7% de incremento de la población en edad para trabajar en Lima y Callao.
    • Seis áreas metropolitanas: Arequipa, Cusco, Trujillo, La Libertad, Tumbes, Lima y Callao, son las más pobladas por los venezolanos.

-¿A qué tipo de barrios fueron a vivir los venezolanos en Lima y Callao?

-Los barrios con alta inmigración venezolana se caracterizan por:

    • Mayor empleo, el 70% de la población en edad de trabajar está empleada.
    • Salarios más bajos, mayor porcentaje de firmas informales (no registradas), menor empleo calificado (mayoría de peruanos con secundaria completa o menos) menos tiempo en las empresas y empleo masculino y joven.

-¿Qué características tienen estos migrantes venezolanos que se movieron a Perú?

-El flujo migratorio de Venezuela a Perú es distinto al de Colombia. En este último, la mayoría de los venezolanos no tienen secundaria completa 63% aproximadamente. En Perú, más del 40% tiene estudios superiores o secundario completo. Los migrantes venezolanos son relativamente más calificados que los trabajadores en el país de destino (peruanos).

-¿Había recibido Perú inmigrantes en el pasado?

-Muy buena pregunta. Los flujos migratorios de Venezuela y otros países eran muy estables en Perú antes del éxodo venezolano. Usando datos del Censo 2007, representan menos del 2% de la población en edad de trabajar en promedio en los barrios de Lima y Callao en 2007.

“En la región de América Latina, Perú es el tercer país con mayor cantidad de trabajadores en la informalidad con 72%”

María Noelia Romero

-¿Qué impacto tuvo la llegada de migrantes venezolanos sobre el mercado laboral peruano formal e informal?

-En mi trabajo-estudio reflejamos lo que pasa con el empleo y los salarios de los peruanos en los barrios con más migrantes, versus los que tienen menos porcentaje de inmigrantes venezolanos.

        1. No hay un efecto negativo en el empleo de los peruanos en los barrios con mayor inmigración venezolana. De hecho, encuentro un efecto positivo pero con baja precisión. En los barrios de mucha inmigración venezolana, el empleo peruano crece dos puntos porcentuales con respecto a los de poca inmigración; esto quiere decir que se emplean alrededor de 112 mil peruanos más en los barrios con más venezolanos que en los barrios de poca llegada de venezolanos.
        2. No detecto un efecto negativo grande en los salarios. En esos barrios de alta migración venezolana cae el salario promedio de los peruanos en dos puntos porcentuales, que significa cobrar 4 dólares menos por semana. Eso no es mucho para un peruano con un salario semanal promedio de 230 dólares.

En cuanto a los efectos heterogéneos: No encuentro un efecto negativo en el empleo de los peruanos en condición de informalidad usando la definición amplia que expliqué antes. De hecho, encuentro que lo que explica ese aumento del empleo peruano en dos puntos porcentuales es el empleo formal. Es decir, más peruanos son contratados con los beneficios del empleador en los barrios con mayor cantidad de venezolanos que discutimos anteriormente. Cuando distingo entre peruanos poco y más calificados en el sector formal e informal, tampoco encuentro un efecto negativo en el empleo de los peruanos con menos educación en cualquiera de los sectores. Esto es sumamente sorprendente, porque intuitivamente en economía laboral se dice que migrantes que hablan el mismo idioma pueden sustituir el empleo local. Pero no es el caso de Perú. Este resultado se explica por dos cuestiones: El salario mínimo no restringe el salario promedio de un trabajador formal no calificado. 95 dólares vs. 75 dólares de salario mínimo. Margen para que el mercado laboral formal ajuste el shock de oferta laboral a través de los salarios. Si es relativamente más barato, se emplea más trabajo no calificado porque se complementa con este flujo migratorio que es relativamente más calificado. Pocas sustituciones de un peruano por un venezolano. Estos resultados que encuentro para Lima y Callao son consistentes con los que otros trabajadores encontraron para todo el país. No se detecta ningún efecto negativo y significativo estadísticamente en el empleo ni en los salarios. Efectos nulos.

-¿Qué recomendaciones de políticas públicas harías a los gobiernos de América Latina?

-Regulaciones migratorias y del mercado laboral. El salario mínimo por debajo del salario de equilibrio, le da flexibilidad suficiente a las empresas y trabajadores para ajustar el empleo formal de los peruanos. Esto es un resultado deseable por lo antes mencionado de que trabajadores sin cobertura médica no tengan desplome en el salario, ni caigan en la pobreza si no pueden ir a trabajar. Mercado informal dominante queda para investigación futura, el efecto de permiso temporal de trabajo por ejemplo. Habiendo pocos incentivos para solicitar el carnet de inmigrantes, solo un 50% lo solicita.


*Ceteris Paribus, Podcast de Economía en Español del Penn Initiative for the Study of Markets del Departamento de Economía de la Universidad de Pensilvania. “El pasado, presente y futuro de la economía en español, haciendo seguimiento de América Latina”.

La opinión emitida en este espacio refleja únicamente la de su autor y no compromete la línea editorial de La Gran Aldea.